Investigadores del Instituto de Neurociencias de Alicante resuelven el misterio de la sonrisa de La Gioconda.
La tesis más aceptada sobre la identidad de Mona Lisa postula que se trata de la esposa de Francesco Bartolomeo Giocondo. De aquí su nombre oficial. Seguramente, aquella noble italiana que posaba ante Leonardo no imaginaba que el gesto de su sonrisa iba a ser objeto de literatura e investigaciones científicas. Este estudio, publicado en la revista científica New Scientist, revela que la ambigüedad de Mona Lisa se debe a la fisionomía del ojo humano.
Unas veces sonríe, otras veces tiene un gesto serio. No es la primera investigación que trata de desvelar el enigma de Mona Lisa. Este grupo de científicos del Instituto de Neurociencias ha encontrado una explicación más al misterio: depende de la imagen que tomen las células de la retina y del canal por el que se envíen al cerebro. El semblante serio o la sonrisa carismática de Mona Lisa depende la mezcla de imágenes que llegan a nuestro cerebro. Una especie de ilusión óptica.
Según explica el director del equipo de investigación, Luis Martínez Otero, en el ojo humano hay un grupo de células que se encargan de identificar colores, contrastes, figuras, entre otras percepciones. Cada grupo de células recoge una visión diferente y cada una lucha con las demás hasta formar un conjunto. Posteriormente son trasmitidas al cerebro por uno de los canales del sistema nervioso. Mona Lisa tendrá un gesto serio o sonriente según el canal por el que circule la imagen.
La tesis más aceptada sobre la identidad de Mona Lisa postula que se trata de la esposa de Francesco Bartolomeo Giocondo. De aquí su nombre oficial. Seguramente, aquella noble italiana que posaba ante Leonardo no imaginaba que el gesto de su sonrisa iba a ser objeto de literatura e investigaciones científicas. Este estudio, publicado en la revista científica New Scientist, revela que la ambigüedad de Mona Lisa se debe a la fisionomía del ojo humano.
Unas veces sonríe, otras veces tiene un gesto serio. No es la primera investigación que trata de desvelar el enigma de Mona Lisa. Este grupo de científicos del Instituto de Neurociencias ha encontrado una explicación más al misterio: depende de la imagen que tomen las células de la retina y del canal por el que se envíen al cerebro. El semblante serio o la sonrisa carismática de Mona Lisa depende la mezcla de imágenes que llegan a nuestro cerebro. Una especie de ilusión óptica.
Según explica el director del equipo de investigación, Luis Martínez Otero, en el ojo humano hay un grupo de células que se encargan de identificar colores, contrastes, figuras, entre otras percepciones. Cada grupo de células recoge una visión diferente y cada una lucha con las demás hasta formar un conjunto. Posteriormente son trasmitidas al cerebro por uno de los canales del sistema nervioso. Mona Lisa tendrá un gesto serio o sonriente según el canal por el que circule la imagen.
Pues ¿te puedes creer que yo nunca le he visto ningún misterio? Tengo mil fotos en las que salgo con el mismo gesto, seguro que el Leonardo estaba dando por culo diciendo: sonríe, sonríe, sonríe y la pobre estará hasta los cojones y se le quedó esa cara
ResponderEliminarBuen blog Miguel.
ResponderEliminarMuy interesante, son noticias que, aunque curiosas, pasan desapercibidas.
Te enlazo en mi blog, saludos